Dedicado a mi cuñado Francisco Pérez Molina, apodado «Paquito Chocolatero».
Dicen las crónicas que una tarde en que se hallaban los dos cuñados juntos, Gustavo le dijo a Francisco: «mira, aquí hay unos cuantos pasodobles, dime cuál es el que te gusta y le pongo tu nombre». La respuesta no se hizo esperar y le dijo: «Quiero este, pues creo que va a ser muy conocido por todo el ambiente festero».
Se estrena por primera vez en 1941